Esta semana hemos conocido un personaje nuevo del País de las Letras , "Letrilandia". Se trata del lechero que lleva la leche a los habitantes de este curioso país después de haber ordeñado las vacas. Con esta rica leche se ponen más altos y fuertes los niños/as y también gracias a esta leche el panadero , la "p", puede hacer ricos pasteles, flanes, batidos, natillas, chocolates,...
" Un día ," el príncipe E" tan travieso como siempre , quiso levantar la pesada lechera que el señor L había dejado en el jardín. Cuando ya había conseguido levantarla, tropezó y se cayó y con él la lechera y la leche. Parecía que se había dado una ducha de nieve, con toda la leche por encima. !Estaba tan blanco!. Un perro que había por allí , se acercó a lamer toda la ropa del travieso príncipe E. El rey pagó la leche que se había caído , pero luego el príncipe tuvo que ir devolviendo poco a poco a sus papás lo que valía la leche derramada, quitándolo de sus propinas. Era justo. Así aprendería a ser más cuidadoso.
Normalmente , cuando el lechero terminaba su trabajo , se iba al huerto a cultivar y coger lllllechugas, que le encantaban en la ensalada. Un día se llevó de paseo a las vacas. Las dejó a la orilla del río pastando, pero, cuando se dió cuenta , ya las tenía dentro del huerto comiéndose las lechugas, así solas, aunque no estuvieran en la ensalada...No pudo enfadarse, pues la culpa era suya por no tener más cuidado. Otra vez las dejaría atadas para que no hiciesen travesuras.
Fijaos en que para hablar como el llllechero , tenemos que tener la boca abierta y la punta de la lengua detrás de los dientes superiores. Hagamos nosotros de lechero y gritemos como él: !Llllllllechero, llllllechero, rica llllllleche!. !Llevo nata, mantequilla y queso!. !Llllllllechero !. "
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